INGREDIENTES
- 1 kilo y 1/2 de calabaza con piel
- 1 cebolla grande
- 200 ml de caldo de pollo
- 125 ml de nata para cocinar
- Sal
- 3 granos de pimienta blanca
ELABORACIÓN
- Precalentar el horno a 200º.
- Limpiar la calabaza con un paño húmedo y poner con piel sobre la bandeja de horno (si es muy grande, partir a la mitad), la cual habremos protegido con una lámina de papel para hornear, junto con la cebolla entera con piel.
- Dejar asar tapada con un papel de aluminio durante al menos 20-25 minutos, (según el horno) altura baja. Antes de sacar, pinchar con un palillo de brocheta para comprobar que está del todo tierna.
- Sacar y dejar enfriar.
- Quitar la piel y las pipas con cuidado de no olvidar alguna. Trocear y poner en un cuenco hondo para poder triturar después. Añadir la cebolla, la nata, la pimienta blanca, la sal y el caldo de pollo. Pasar por la batidora y rectificar de sal.
- Probar, y si gusta menos dulce, añadir un ligero chorrete de vinagre de manzana, y seguir batiendo unos segundos más.
- Servir caliente.