INGREDIENTES
- 2 solomillos de cerdo de unos 400 gr cada uno
- 1 loncha de jamón serrano de 50-70 gr
- 100 ml de aceite de oliva
- 1 cebolla dulce grande
- 5 dientes de ajo
- 1/2 vaso de vino blanco
- sal
ELABORACIÓN
- Limpiar de grasa y ternillas los solomillos, cortar en rodajas de un centímetro de grueso, más o menos, y salpimentar ligeramente.
- En una cacerola, poner la mitad del aceite de oliva y calentar a fuego fuerte.
- Poner las rodajas de solomillo en ella y sellar bien para que no se salgan los jugos de la carne, pero sin pasar demasiado. Sacar y reservar.
- Añadimos el resto del aceite a la cacerola. Cortar la cebolla en juliana gruesa, pelar los ajos, trocear a la mitad, y rehogar en el aceite hasta que quede todo muy dorado.
- Poner el vino blanco y cuando se haya evaporado el alcohol, verter un vaso de agua a los ingredientes. Dejar que se haga la salsa unos 10-15 minutos a fuego medio. Antes de que reduzca del todo, incorporar el jamón serrano cortado a tiras pequeñas. Rectificar de sal.
- Introducir los solomillos en la salsa y dejar de 8-10 minutos más, dependiendo de lo hechos que nos hayan quedado al sellarlos.
- Servir calientes y con la salsa por encima.