INGREDIENTES
- 1 pechuga de pollo entera (con caparazón y alas)
- 1 hueso de canilla blanco
- 2 litros de agua (aproximadamente)
- 2 cucharadas de pan rallado
- 50 ml de vino blanco
- 1 huevo duro y 1 huevo crudo
- 100 gramos de jamón serrano picado
- Sal
ELABORACIÓN
- Limpiar bien de grasa y plumillas la pechuga, y poner en una olla a presión con el agua en ebullición junto con el hueso de canilla. Cerrar y dejar unos 30 minutos (más o menos según la olla)
- Sacar y dejar enfriar.
- Colar el caldo sobre una cacerola, y poner de nuevo al fuego medio- bajo.
- Sacar la carne de la pechuga y las alas y picar. Poner en un bol sólo la mitad (la otra mitad se puede aprovechar para croquetas) junto con el huevo crudo, (sin batir para que de consistencia)un poco de sal, un chorrete de vino blanco, y el pan rallado.
- Amasar con la mano hasta que quede bien mezclado todo.
- Poner en un plato el resto del vino blanco, untar los dedos y coger pequeñas porciones de la masa de pechuga para hacer bolitas de albóndigas.
- Introducir en el caldo una a una conforme se vayan haciendo, y dejar cocer no más de 15 minutos. Rectificar de sal.
- Presentar en una sopera, junto con el jamón y el huevo duro picado puesto por encima de la sopa de albondiguillas.